[Todos] FCEN: comenzó el plebiscito CONEAU, tu voto decide

[conCienciaCrítica, Graduados FCEN]

DEFENDAMOS LA UNIVERSIDAD PUBLICA Y GRATUITA, RECHACEMOS LA CONEAU

¿De dónde viene la CONEAU?.

La Ley de Educación Superior (LES) fue aprobada en 1995, durante la
presidencia de Menem. Entre otras cuestiones, la norma impone que las
carreras consideradas "de interés público" cumplan con la obligación de
acreditar periódicamente. Con este fin crea la CONEAU (Comisión Nacional
de Evaluación y Acreditación Universitaria) en su artículo
46. Este organismo está conformado por 12 miembros: tres elegidos por la
Cámara de Diputados, tres elegidos por la Cámara de Senadores, uno elegido
por el Ministerio de Educación, uno elegido por el Consejo de
Universidades Privadas y uno por la Academia Nacional de Educación, y solo
tres miembros (es decir, una cuarta parte del total) son elegidos por las
Universidades Públicas. Claramente se trata un cuerpo dependiente del
poder político.

La LES y la CONEAU se encuadran en la oleada liberal de mercantilización
de la educación. Esto se refleja en toda la terminología utilizada en su
normativa. La propia Ley de Educación Superior caracteriza a la educación
universitaria como un servicio y no como un derecho y un bien social y
estratégico para el desarrollo del país:

LES - Artículo 2: El Estado al que le cabe responsabilidad indelegable en
la prestación del servicio de carácter público, reconoce y garantiza el
derecho a cumplir con ese nivel de la enseñanza a todos aquellos que
quieran hacerlo y cuenten con la formación y capacidad
requeridas.

En nuestra facultad hay tres carreras declaradas de interés por el
Ministerio de Educación (Química, Geología y Computación). Esto fija los
plazos para decidir su acreditación ante la CONEAU de forma inminente.

¿Cuál es el objetivo de la LES y la CONEAU?

La LES y la CONEAU son el resultado de los acuerdos entre Menem y el Banco
Mundial para transformar la educación universitaria en la Argentina. Los
organismos financieros internacionales tuvieron más influencia en la
redacción de esta norma que la propia comunidad universitaria. En el
documento “La enseñanza superior: las lecciones derivadas de la
experiencia” (1995), es posible destacar estas premisas:

"Controlar el acceso a la educación superior a cargo del Estado en función
de criterios de selección eficientes (…)”; “Crear un ambiente propicio
para las instituciones privadas”; “Establecer o aumentar la participación
de los estudiantes en el costo de su educación y otras medidas de
diversificación financiera."

Es decir, se promueve la disminución de los fondos del Estado destinados a
la educación superior, la reducción del número de estudiantes de las
universidades públicas mediante restricciones de ingreso; se promueve a
las universidades privadas y se propicia el arancel y el
autofinanciamiento con servicios a terceros, postgrados y maestrías
arancelados.
El recurso de amparo UBA y el fallo judicial contra la LES

En el momento de su aprobación, el rechazo a la LES convocó a la mayor
parte de las autoridades universitarias del país, a docentes, graduados y
estudiantes que se movilizaron masivamente frente al Congreso. Una vez
promulgada, las universidades públicas en su mayoría recurrieron a la
justicia buscando la declaración de inconstitucionalidad por considerarla
violatoria de la autonomía universitaria. Entre ellas la UBA logró un
dictamen favorable que la exime de aplicar la polémica normativa.

Mediante el fallo del juez federal Ernesto Marinelli en el año 1996 se
declaró la inconstitucionalidad de art 29 de la LES que determina los
alcances de la autonomía universitaria; los art. 42 y 43, referidos a los
contenidos de los planes de estudio; art. 46 sobre el establecimiento del
Ministerio como acreditador de carreras de grado; y art. 50 que hace
referencia a los regímenes de admisión, permanencia y promoción de los
estudiantes. Por lo tanto plantear que “como es una ley hay que cumplirla”
resulta una falacia.

En la actualidad…

Lejos de rechazar estas políticas, en nuestra facultad se profundizó el
autofinanciamiento por recursos propios en el último tiempo. El año
pasado, ingresaron por esta vía unos $13.000.000, de los cuales la
facultad se queda con entre un 10% y un 20%. Esto quiere decir que del
presupuesto de funcionamiento para la facultad, casi la mitad proviene de
autofinanciamiento.

Hoy en día, tanto a nivel de la UBA como de nuestra facultad, las
autoridades promueven la acreditación de las carreras de grado ante la
CONEAU, terminando con más de diez años de resistencia de la Universidad
de Buenos Aires a la LES menemista.

Desde conCienciaCrítica, impulsamos un verdadero plebiscito co-organizado
entre la AGD y el CECEN en el que docentes, graduados y estudiantes nos
pronunciemos en la única pregunta que la facultad tiene que decidir: "La
FCEyN debe acreditar las carreras de grado ante la CONEAU?"

EL FUTURO DE LA FCEN ESTÁ EN JUEGO,
Plebiscito del 3 al 7 de mayo. TU VOTO DECIDE.

-- 
conCienciaCrítica,
Docentes, Becarios y Graduados de Ciencias Exactas y Naturales
Corriente Nacional Protagonismo y Lucha
http://concienciacritica-cnpl.blogspot.com