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[Taller de Aguas]

Voluntariados Universitarios: proyectos de la FCEyN se quedan sin
financiamiento

En los últimos años se han conformado en la FCEyN varios grupos de
extensión que abordan problemas ambientales integrados por estudiantes,
docentes y graduados que nos hemos planteado poner nuestros conocimientos
al servicio de los sectores populares que pelean por cambiar su realidad
cotidiana. La falta de acceso al agua potable y cloacas y el problema de
la basura en el conurbano; los impactos de la megaminería en los pueblos
cordilleranos; los efectos de la expansión de la frontera agrícola y el
acceso al agua en comunidades originarias, son algunas de las temáticas
que nos nuclean.

El concepto de “Extensión Universitaria” engloba hoy en día proyectos de
muy diversas características: de divulgación, de transferencia, de apoyo
escolar, de investigación participativa, etc. Dentro de esta diversidad,
nosotros hallamos particular interés en realizar proyectos  en los cuales
se intenta una vinculación bidireccional con el resto de la sociedad,
mediante un trabajo conjunto que presupone un aprendizaje recíproco.  En
donde se promueva la organización social, la transferencia del
conocimiento académico al campo popular y viceversa, de los saberes y
sentires populares a la academia, dando instrumentos que contribuyan a
revertir las desigualdades. Esta concepción se encuentra enmarcada en lo
que entendemos debe ser el objetivo principal de la Universidad: ser un
actor en el camino hacia una sociedad más justa. Por eso, en este
recorrido, también hemos buscado promover otro modelo de Universidad. Una
Universidad en la que se utilice el conocimiento y la práctica científica
para la resolución de problemáticas sociales, buscando superar el divorcio
existente entre las actividades del mundo académico y las necesidades de
nuestro pueblo.

Algunos de nosotros comenzamos a desarrollar proyectos de extensión cuando
ni el Ministerio de Educación, ni la UBA, destinaban fondos para su
desarrollo, y en este camino, entendiendo que la Extensión es uno de los
tres pilares de la Universidad Pública, dimos el debate de la necesidad
del financiamiento por parte del Estado, reclamo que fue acompañado por
gran parte de la comunidad en nuestra Facultad.
Hoy, ante los resultados de la última convocatoria del Programa
Voluntariado Universitario del Ministerio de Educación, vemos con
preocupación la posibilidad de que este tipo de proyectos queden truncos.
En años anteriores todas las solicitudes realizadas por estos grupos
habían recibido respuestas favorables del Programa Voluntariado,
recibiendo financiamiento. Hoy ninguno de ellos ha resultado seleccionado
para recibir nuevos subsidios. Nos preguntamos entonces si el Ministerio
considera que estos proyectos no tienen la pertinencia suficiente. ¿O
acaso se buscará desalentar el desarrollo de proyectos cuyos resultados
pueden poner en evidencia a un Estado que no ha resuelto las necesidades
básicas de los sectores más postergados, echar luz a los efectos de un
modelo que empuja la frontera agrícola a niveles impensados desplazando a
comunidades originarias, dar evidencias del saqueo y contaminación de los
emprendimientos de megaminería que se multiplican a lo largo de nuestro
territorio?

Por otro lado, no podemos dejar de mencionar que si bien probablemente
muchos de los proyectos que sí fueron subsidiados sean valiosos, vemos una
falta de transparencia en el otorgamiento de los mismos: no se dieron a
conocer los criterios de evaluación, ni existe un orden de mérito público
que permita entender por qué unos fueron financiados y otros no. A la vez,
vemos con preocupación que pueda haber existido cierto sesgo en la
selección, ya que en muchas unidades académicas y universidades se ha
observado que un gran número de proyectos financiados pertenecen a grupos
afines al gobierno o las gestiones universitarias.
Ante esta situación ratificamos nuestra voluntad por continuar
construyendo un conocimiento crítico, de la mano de los sectores más
postergados. Al mismo tiempo ponemos en alerta a toda la comunidad y
exigimos transparencia en la evaluación de proyectos y un debate público
de los criterios utilizados para la selección de los mismos.


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