[Todos] ¿Hacia dónde va el sistema científico?

[El Transformador]

Hoy comienzan las elecciones de Consejo Directivo para el claustro de
graduados!

VAMOS CON GRADUADOS AL FRENTE!

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¿HACIA DÓNDE VA EL SISTEMA CIENTIFICO?

LO QUE NOS DEJÓ EL CIC 2012

  Recientemente, se publicaron los resultados de la convocatoria 2012 a
Ingreso a Carera del CONICET. Más allá de que una vez más no se
publicaron los puntajes y órdenes de mérito, los criterios de evaluación
y el corte de ingreso, los mismos arrojaron que fueron 752 los jóvenes
investigadores que no ingresaron.
  En algunas áreas que involucran a nuestra facultad, como las biomédicas,
no ingresó el 56% de los postulantes. Estos números no incluyen a
aquellos que quedarán fuera cuando se publiquen los resultados de becas
post doctorales, a fin de año.
(http://web.conicet.gov.ar/documents/16254/1946014/tabla-1-Gran-Area.pdf?version=1.0)

  Desde 2010 hasta la fecha, la sumatoria de postulantes que han quedado
fuera del CONICET fue de 4458. Aún restando a aquellos que pudieron
Presentarse en más de una ocasión, el número no descendería de 4000
científicos que quedan fuera del sistema público de investigación.


¿Y AHORA QUÉ HACEMOS?

  Frente a este panorama, miles de compañeros formados deben enfrentarse a
la búsqueda laboral luego de años de trabajo dentro del sistema
científico. Desde el CONICET se nos responde que debemos insertarnos en
las universidades, el sector productivo u otros ámbitos públicos. Así
vemos como en Exactas, aumentan y aumentan los concursantes para cargos
exclusiva- y también simples-sin que aumente el número de cargos. En una
Universidad donde existen miles de docentes sin salario o sub rentados,
el panorama de inserción no es el que nos pinta el Dr. Salvarezza. Lo
mismo ocurre en los hospitales y otros organismos del sistema sanitario.

¿Y CUÁNTO VALE TODO LO REGISTRADO, SI EL SUEÑO LLEGA TAN MAL QUE TE CONDENA?

   Cuando observamos qué ocurre en el ámbito privado, vemos que son muy
pocos los científicos formados que logran insertarse. Al parecer, las
empresas prefieren contratar técnicos salidos de las cientos de carrera
terciarias que existen o profesionales universitarios recientemente
egresados. La razón: los costos y la conveniencia. De hecho, cuando
visitamos la página del Programa Más valor.doc, donde el MinCyT vuelca
cientos de miles de pesos para insertar doctores en la “industria”
vemos que los éxitos alcanzan, a 3 años de inicio del programa, 7 casos
de éxito.
(http://www.masvalordoc.conicet.gov.ar/?cat=14).
   En el mismo sentido van los subsidios creados en el último tiempo como
los FONARSEC o EMPRETECNO, en los que se invierten millones de pesos
para formar consorcios mixtos entre empresas y entes públicos (ver
foto). Nos gustaría conocer los números precisos de doctores que se han
insertado mediante este tipo de subsidios. Podemos afirmar, sin
embargo, que los nuevos puestos de trabajo que se crean son menores
dado que las empresas usan personal que ya contrataron previamente y
los entes públicos aportan becarios, investigadores y personal de
planta que ya trabajaba previamente al convenio.


LA LUCHA ES EN DEFENSA DE LA INVESTIGACIÓN PÚBLICA

Desde El Transformador, hemos participado activamente en la denuncia de
esta situación y en la exigencia de que:

-  Se reincorpore a los compañeros que trabajando a la fecha de la
puiblicación de resultados en CONICET han sido recomendados por las dos
comisiones de evaluación.

-  Se publiquen previamente a las convocatorias los criterios de
evaluación y posteriormente los órdenes de mérito y la línea de corte

-  Se garantice la inserción de los compañeros que no han sido
recomendados, entendiendo que no pueden quedar en la calle ni deberían
forzados a realizar cualquier otra tarea ajena a su trabajo previo.

PERO ENTONCES…. ¿NOSOTROS PLANTEAMOS QUE EL CONICET INCORPORE A TODOS LOS
DOCTORES?

  No, a pesar de las tergiversaciones de los funcionarios, no planteamos
que sólo el CONICET debe incorporar a los compañeros que se quedan
afuera. Considerar que el único ámbito público en el que puede
desarrollarse la investigación es el CONICET es un absurdo, y una
hipocresía. Existen cientos de institutos donde podrían desarrollarse
actividades de gran interés: producción Publica de medicamentos y
reactivos para investigación, producción de vacunas, nuevas fuentes de
energía, alimentos funcionales, entre otros. Sin embargo, las
instituciones creadas con esos fines, se encuentran muchas veces
desfinanciadas y vaciadas (ANLIS-Malbrán, Fatala Chabén, INEP, entre
otras).
  Es decir que quienes nos acusan de querer abroquelarnos al CONICET cual
parásitos, son los mismos que no reclaman ni instrumentan el presupuesto
necesario para que podamos insertarnos realmente en otros ámbitos
públicos. Lo mismo ocurre en las Universidades, que el mismo gobierno
que nos expulsa del sistema científico mantiene en la situación más
precaria.

UNA SOLUCIÓN DE FONDO, A UN PROBLEMA QUE ES DE FONDO

“Estoy de alguna forma menos interesado en el peso y las convoluciones del
cerebro de Einstein que en la casi certeza de que gente con igual talento
ha vivido y muerto en los campos de algodón y en los talleres de trabajo
esclavo.” Stephen Jay Gould, paleontólogo, biólogo evolutivo.

  Desde El Transformador, creemos que el debate sobre el modelo científico
va de la mano sobe un debate más profundo acerca de la sociedad en qué
vivimos y los valores que predominan. ¿O es acaso posible imaginar una
ciencia radicalmente distinta a la que conocemos dentro del sistema
capitalista actual? Es difícil pensar que un sistema que permite que
millones mueran de hambre en un lugar del mundo mientras en otra parte
se deshecha la comida por falta de demanda comercial, donde millones de
niños mueren de enfermedades evitables y en el que, en el siglo XXI, aún
tenemos mano de obra esclava, valoraría la ciencia desde otra concepción
que no sea la de la mayor ganancia posible.

  Por eso, es necesario dar la lucha para que el sistema científico se
sustente en forma pública y no privada, para que seamos quienes
trabajamos todos los días en la ciencia quienes debatamos y decidamos
qué se investiga, cómo y por qué. Para que la ciencia no se convierta en
otro producto mercantilizado, y el científico no sea un ser ajeno a la
realidad y a los problemas sociales que lo rodean, ajeno a las
implicancias de lo que investiga. Sólo comenzando a transitar este
camino podremos transformar la ciencia mientras transformamos la
sociedad.

EL TRANSFORMADOR en GRADUADOS AL FRENTE